La actriz Jone Laspiur se hizo un nombre entre los espectadores gracias a su actuación en Ane, por cuyo trabajo recibió el Goya a la Mejor Actriz revelación. Ahora, vuelve a demostrar su valía con el complicado personaje de Laida, en el drama La isla de los faisanes, donde se narra el viaje emocional que realiza una joven tras salvar a un inmigrante africano de ahogarse en el río Bidasoa, frontera natural entre España y Francia.
Su personaje, Laida, se lanza a salvar a una persona de un ahogamiento. ¿Cree que arriesgar la vida por un desconocido es un acto de valor o depende de su personalidad?
Laida tiene valor, pero este personaje está marcado por otros factores, como el carácter, la impulsividad y su propia biografía. Por supuesto, es valiente pero también es comprensible la postura de su pareja, Sambou, que no se tira a salvar al otro inmigrante.
La isla de los faisanes habla de fronteras y describe que, en Francia, son menos permisivos que en España a la hora de recibir personas ilegales.
Realmente no sé si esto es así. Porque miras las fronteras del sur del país y sucede lo mismo. En la película se narra de esta forma porque los migrantes africanos quieren salir de España, cruzar la frontera e ir hacia París u otras naciones del norte de Europa. Hablamos de un problema a nivel mundial, ningún estado europeo está acogiendo bien a los migrantes desplazados de África o de otros países.
El personaje que interpreta es una heroína de causas aparentemente perdidas. ¿Cree o quiere creer que hay mucha gente como ella?
Desde luego que la hay y lo estamos viendo. A raíz de trabajar en esta película he tomado conciencia de que hay muchos voluntarios en la frontera, muchas Laidas. Hay personas que están en la red de acogida, que ayudan de forma altruista… ¡Menos mal!
La película retrata a la sociedad vasca abierta a otras culturas y razas, incluso su personaje tiene como pareja a un joven negro. ¿Esto es así?
Pienso que, en los últimos años, el pueblo vasco ha aprendido muchísimo. Pero no creo que nos salvemos, no obstante somos un pueblo de mucha militancia y eso nos ha podido acercar más a políticas antirracistas.
Viendo su filmografía siempre interpreta papeles complejos. ¿Le buscan o es usted quien los elige?
Yo creo que me buscan, algo debo reflejar porque me suelen dar papeles con contradicciones. Papeles de chicas fuertes y concienciadas pero con una parte frágil y vulnerable.
Creo que tiene una buena relación con la música e, incluso, es usted cantante. ¿Esto implica que le gustaría intervenir en un musical o prefiere separar ambas facetas?
Soy la cantante del grupo Nakar. De hecho, en la película, se escucha una canción que compuse para mi grupo. Es la primera vez que se han aunado mis dos facetas, estos dos mundos, y he de admitir que la música es un terreno que no quiero profesionalizar, es mi zona de placer, porque hago música con mis amigos.