La reserva de agua del embalse de Yesa no registraba datos tan bajos desde hace dos décadas. Su capacidad en estos momentos se encuentra en torno al 50% y desde la Confederación Hidrográfica del Ebro ya advierten de que, a menos de que se de un cambio importante en las precipitaciones durante los próximos días, la situación seguirá en emergencia.
La presidenta de la CHE, María Dolores Pascual, reconoce que se "atraviesa una de las situaciones de sequía más grave" al afectar a la mayor parte de la Cuenca del Ebro. Un escenario que se agrava, sumado a que los embalses todavía no se han recuperado de la sequía del 2022, un año en el que los agricultores ya tuvieron restricciones para el campo.
El análisis de las reservas hídricas se realiza, desde el pasado 26 de abril, de manera quincenal y la declaracion de situación de emergencia otorga a la Confederación Hidrográfica del Ebro garantías jurídicas para la adopción de medidas excepcionales.
Yesa desde lo alto - Foto: NATVAnte este panorama, ya se están adoptando medidas como la condonación de los cánones y la rebaja de tarifas para los sistemas de riego. Además, hay que añadir las obras de emergencia de los embalses del Ebro para garantizar los abastecimientos de agua a Cantabria y Zaragoza.