Osasuna perdió dos puntos en su visita a Las Palmas al encajar el gol del empate en el minuto 98, anotado por Januzaj al saque de una falta en la frontal del área. Antes, en el minuto 53 Aimar Oroz había adelantado a los navarros, que vieron cómo los canarios se quedarían con un jugador menos en el tramo final del partido. Sin embargo, a pesar de la diferencia numérica de jugadores, a raíz de ese momento Las Palmas encerró a los de Pamplona y acabaron encontrando el camino del gol. Se dio también la circunstancia de que el colegiado añadió 13 minutos de prolongación.
En los primeros compases de partido Osasuna salió a esperar a los locales, que pese a su ímpetu inicial se fueron apagando poco a poco, por lo que fue el equipo de Vicente Moreno quien fue a más y acabó imponiendo su mayor control del balón. Jugadores como Rubén García y Aimar Oroz eran los más destacados del cuadro navarro, que rozó el 0-1 por dos veces. Primero en un saque de falta que Rubén mandó por encima del larguero y después Budimir con una doble ocasión que no logró materializar. También Las Palmas rozó el gol, aunque en este caso sería en una acción polémica. Los amarillos reclamaron penalti y tras la revisión del VAR, cuando parecía que se iba a penalizar a Osasuna, una falta previa en favor de los rojillas evitó que se señalase la pena máxima. Así se llegó con el 0-0 al descanso.
Ya en la segunda mitad Osasuna impuso su dominio desde un inicio y acabó logrando el gol a su favor. Dicho tanto se produjo tras una buena acción de Areso, que mandó el balón al área y Budimir intentó rematar. Sin embargo, el rechace le favoreció a Aimar Oroz y éste a la media vuelta consiguió perforar la portería local.
A partir de ese momento el equipo canario aumentó el ritmo y empezó a jugar con más corazón que cabeza, llegando incluso a quedarse con un jugador menos por protestar. Pero lejos de favorecer a Osasuna, esa circunstancia cambió por completo el partido, con un equipo navarro metido atrás y que concedió numerosas acciones a balón parado, hasta que ya en la prolongación, una de ellas supuso el 1-1 final.
Se trata de un empate que duele mucho a Osasuna, pues hizo méritos de sobra como para ganar, pero otra vez el no saber leer los minutos finales le privó de la victoria.