El 1 de noviembre, con motivo de la festividad de Todos los Santos, es una fecha marcada en rojo en el calendario de las floristerías, que ya llevan semanas preparando numerosos pedidos. Un año más, el aumento de los precios no ha sido impedimento para que los navarros y navarras adquieran distintos ramos y/o coronas con las que acudir a los cementerios y recordar a sus seres queridos en una fecha tan señalada.
Rosas, claveles, margaritas... Son muchos los tipos de flores por las que se decantan los ciudadanos, que durante estos días dan colorido a los cementerios de la Comunidad foral. Se trata de la temporada alta para los comercios de este tipo.