Sevilla y Osasuna se medían en el Ramón Sánchez - Pizjuan en situaciones dispares. Los andaluces con una situación de crisis tras los últimos resultados que propiciaron la llegada al conjunto sevillano de Quique Sánchez Flores, mientras que los navarros llegaban con una dinámica ascendente después de las últimas tres victorias en ElSadar, la última el pasado fin de semana ante el Getafe. Por eso, quizás, Jagoba Arrasate decidió dar continuidad al mismo once titular que ganó a los azulones. También mantenía el sistema de 5-3-2, aunque en esta ocasión se medía a un Sevilla replegado. Eso hizo que la primera mitad fuese falta de ocasiones. Los locales esperaban a un Osasuna que no tenía profundidad y por eso apenas inquietó la portería del Sevilla. Por su parte los de Quique Sánchez Flores robaban en campo propio y pretendían sorprender a un cuadro navarro que si se relajaba en los repliegues, sufría demasiado.

Con este planteamiento de partido fue Isaac el jugador más incisivo del equipo andaluz, que hacía mucho daño, sobre todo, a la espalda de Catena. En una de esas transiciones estuvo muy cerca de anotar porque, aunque parecía fuera de juego, la acción acabó valiendo y Sergio Herrera salvó a los suyos con una gran estirada al palo contrario. Después llegaría otra jugada muy similar, aunque en este caso con Ocampos como protagonista. Juan Cruz no logró despejar en última instancia y ese error del rojillo propició que el atacante sevillista no aprovechase su clara ocasión de gol. Se vio sorprendido y no acertó a rematar.

El partido se acercaba a la primera media hora de juego cuando a los 24 minutos de disputa, otra jugada a la espalda de Catena la ganó Isaac y esta vez sí logró supera a Herrera con un certero remate al palo largo. Protestó Jagoba Arrasate esa jugada, pues todo se originó en un saque de banda que el Sevilla sacó más adelante de donde realmente había salido la pelota. Unos metros de ventaja que irritaron al técnico osasunista y que el árbitro, sin embargo, pasó por alto. También lo hizo el VAR.

Crónica - Foto: Julio Muñoz

Con la desventaja en el marcador Osasuna se vio obligado a darle más velocidad al balón, pues el Sevilla mantenía su plan de partido, totalmente replegado en campo propio. De esa manera en el minuto 32 se produjo el primer remate entre palos del equipo rojillo. Fue Moi Gómez quien tras recibir el balón en la frontal del área se sacó un remate raso que a punto estuvo de sorprender al portero. El balón quedó rechazado y Ante Budimir no llegó a aprovecharlo por muy poco. Sin más sobresaltos el colegiado decretó el final de la primera mitad.

Al paso por vestuarios se mantuvo lo visto en la primera mitad. Un Sevilla replegado ante un Osasuna que lo intentaba de menos a más. Los navarros sacaban centros laterales y tanto Budimir como Raúl buscaban el remate, pero o los centros no eran adecuados o los centrales ganaban las disputas por alto. Pese a ello Raúl García contó con un cabezazo en el segundo palo y el balón se marchó al lateral de la red. Las intentonas rojillas acabarían teniendo su premio en el minuto 54, cuando en un saque de esquina, Raúl García remató con su pierna izquierda un envío al segundo palo. Ese remate que no iba en dirección correcta lo prolongó Ante Budimir dentro del área y el croata consiguió empatar el partido.

Tras el 1-1 el Sevilla continuó con su planteamiento, aunque ahora intentaban robar con más intensidad ante un Osasuna que empezó a mover el banquillo. Jagobar dio entrada primero a Jesús Areso, que sustituyó a Rubén Peña. El goleador ante el Getafe daba oxígeno a los de Pamplona, que insistían por banda poniendo centros. También entraron al verde Jon Moncayola por Moi Gómez y Aimar Oroz por Pablo Ibáñez. Ante estos cambios también el equipo andaluz movió ficha, metiendo un delantero más en el campo como es Rafa Mir para tratar de tener presencia con balón en terreno rival. Luego sería José Arnaiz el que entraría por Raúl García en bando osasunista.

El Sevilla se veía obligado a adelantar líneas, a arriesgar en salida de balón y eso con un centro del campo renovado en Osasuna favoreció la presión de los rojillos. Los de Tajonar lograban robar y se generaban situaciones de peligro. En una de esas recuperaciones visitantes Suso hizo falta a Aimar Oroz y aunque el colegiado lo castigó con tarjeta amarilla, el VAR acabó corrigiendo al árbitro de campo y vio la roja, dejando al Sevilla con un jugador menos en el minuto 85. 

Quedaba poco pero el colegiado añadió siete minutos en el tiempo extra, lo que dio más ocasiones de peligro a los rojillos. Aimar Oroz estuvo a punto de marcar con un remate de rosca que cogió de primeras. Ese balón se marchó fuera rozando la escuadra. También Jon Moncayola dispuso de otro chut que se marchó alto. Por contra, Rafa Mir no llegó a rematar un balón repelido por Sergio Herrera tras una primera intervención.

Ninguno de los dos equipos logró cambiar el resultado y ambos se tuvieron que conformar con el reparto de puntos.La sensación en los locales no fue buena dada la situación en la que se encuentran, mientras que en los rojillos fue positiva. Osasuna sigue sumando en este 2024.