Cientos de personas, convocadas por la Plataforma Antirracista 21M, se han manifestado en Pamplona este sábado, Día Mundial contra el Racismo y la Xenofobia, para exigir el fin del "racismo estructural" y exigir la implicación de las instituciones navarras en este problema.
Los manifestantes han salido de la Plaza de Merindades portando pancartas con los lemas 'Eskubide guztiak denontzat. Todos los derechos para todas las personas' y 'Israel estatu Arrazista. Stop apartheid genocidio', así como banderas palestinas y romanís y grandes manos negras.
Una manifestación reclama el fin del "racismo estructural"
Durante la marcha se han coreado consignas como 'Ninguna persona es ilegal' o 'Mediterráneo, fosa común'.
Una manifestación reclama el fin del "racismo estructural"La manifestación ha terminado en la plaza consistorial de Pamplona, donde se ha leído un manifiesto en el que se rechaza "un sistema de dominación y de inferiorización en el que se articulan las dimensiones personales, sociales, culturales e institucionales de una sociedad que discrimina y margina a las personas por su origen, color de piel, religión o pertenencia a un grupo étnico".
"Hoy nos movilizamos contra todas las formas de discriminación. Denunciamos las fronteras donde miles de personas mueren cada año buscando un futuro mejor. La militarización de las fronteras y las políticas migratorias son herramientas de enriquecimiento opaco de empresas transnacionales, pero también de control y exclusión que debemos denunciar y combatir con toda nuestra energía", denuncia la plataforma en el comunicado.
En el manifiesto se destaca que las leyes de extranjería son "fruto de políticas migratorias discriminatorias que tratan de poner limite al derecho a la libertad de movimiento, inundando todo de burocracia y requisitos difícilmente alcanzables", como contratos de trabajo, viviendas adecuadas, relaciones familiares sometidas a examen, antecedentes penales que imposibilitan la regularización o abocan a la irregularidad o certificado de empadronamiento.
Además, se pone de relieve que "en nuestras propias calles y con nuestra propia gente, el racismo se expresa en la discriminación en el acceso a la educación, la salud, el empleo, la vivienda y la protección social. Las personas migrantes, gitanas y racializadas son las más afectadas por este sistema de exclusión, explotación, agresión y despojo que es injusto y debemos desmantelar".
Se rechaza asimismo "el sistema de protección social discriminatorio, las redadas racistas, el mayor control policial sobre las personas migrantes y racializadas, la colaboración con la Policía Nacional por parte de las administraciones públicas y resto de cuerpos policiales para facilitar la expulsión de personas extranjeras, la doble condena ante la comisión de un delito: con la pena y con la afectación a su autorización de residencia y el discurso de odio promovido por representantes políticos, políticas y medios de comunicación".
Por estos motivos, la plataforma insta al Parlamento de Navarra a "impulsar procesos de verdad, justicia, reparación y reconciliación" con el pueblo gitano navarro, que incluyan su reconocimiento en el Amejoramiento del Fuero. También el cumplimiento de las medidas y recursos económicos que contempla la Ley Foral de Lucha contra el Racismo y la Xenofobia, "para combatir esta lacra y el antigitanismo: forma especifica de racismo contra la población gitana".
Exige igualmente al Gobierno de Navarra que se constituya el Consejo Navarro para la Lucha contra el Racismo y la Xenofobia y un compromiso real para combatir el racismo estructural, social e institucional.
"La lucha antirracista nos interpela a todas, todes, todos. No podemos limitarnos a observar. Es hora de convertir la rabia en acción, de tejer redes de apoyo mutuo y de organizarnos para construir una sociedad justa e igualitaria", concluye.