'Los árboles que nos quedan' es el título de la muestra que el pintor navarro Tomás Sobrino Habans presenta en la planta baja del Pabellón de Mixtos de la Ciudadela. Un recorrido al óleo por los paisajes de su Baztan querido en las diferentes estaciones del año y por el mar o el río, presentes de forma habitual en su obra. El reflejo de la luz, su característica paleta de colores y la serenidad de sus paisajes naturales describen el universo creativo de Sobrino a lo largo de su larga trayectoria artística.
Como paisajista y miembro de la Escuela del Bidasoa, esta exposición la componen diferentes series. El cromatismo de las estaciones está presente en 'primavera', 'otoño' e 'invierno', tres series que se completan con 'cuatro estaciones', una propuesta en la que el mismo paisaje muta con el paso del año. Marrones, ocres, verdes, azules, violetas o blancos comparten lienzo en múltiples gamas que muestra el devenir de cada una de esas estaciones. En sus paisajes, median la mirada y los colores con los que las arboledas y los montes, las laderas y los caminos obsequian al público. Cada estación es una manera de caminar con el corazón adentro, donde también hay espesuras y ramas desnudas, pulidas por la nieve.
Tomás Sobrino retrata los paisajes de su querido Baztán - Foto: Ayuntamiento de Pamplona
La mirada de Sobrino se centra también en detalles naturales como los carrizos, los ramajes o los hierbajos que surgen en los paisajes, elementos que mantienen la esencia de su pintura y su pincelada. El mar es otro de los temas recurrentes, en este caso, con gamas de azules y blancos, que muestran el romper de las olas con su vaivén de climas que dejan en la orilla lo navegado. Así como los reflejos de esa naturaleza viva en los ríos, con verdes, marrones y azules que tiñen la superficie del óleo sus distintos tonos.
El director de Cultura, Fiestas, Educación y Deporte, Íñigo Gómez, y Tomás Sobrino Habans han presentado una exposición que se podrá visitar hasta el próximo 30 de junio. Las salas expositivas de Ciudadela abren de martes a sábado, de 11.30 a 13.30 horas y de 18 a 20.30 horas, y los domingos y festivos, solo por la mañana, de 11.30 a 13.30 horas.
Pintores del Bidasoa
Nacido en Elizondo, en valle del Baztan, en 1953, pertenece a la cuarta generación de pintores de la denominada 'Escuela del Bidasoa'. Su pintura es fruto de la observación de la naturaleza en su entorno más cercano, un paisaje privilegiado lleno de matices, luces y cromatismos cambiantes a lo largo de las estaciones del año. Sus cuadros son serenos, sin estridencias, transmiten paz y armonía para colocar al público en una actitud de silencio tan necesario en una sociedad llena de ruidos y prisas.
Desde los años 90, Tomás Sobrino es uno de los habituales de la programación expositiva navarra. Sus obras han recorrido muestras por toda la geografía foral, País Vasco, Aquitania y otras ciudades como Madrid, Granada o Palencia. Su última exposición en Ciudadela fue en 2015, donde presentó sus 'Diálogos', con obras en óleo de paisajes, mares y motivos vegetales y con dibujos con punta de plata, una técnica artística que tuvo su apogeo en el siglo XV.