"Quiero que nuestras decisiones no dependan tanto de Madrid"

Ricardo Beitia
-

Tras tomar el relevo de Uxue Barkos, el nuevo líder de Geroa Socialverdes, Pablo Azcona, considera que la formación integrada en la coalición Geroa Bai va a ser clave para asentar su espacio político en Navarra

El pasado fin de semana, el parlamentario foral de Geroa Bai, Pablo Azcona, se convertía en el nuevo Secretario General de Geroa Socialverdes, la formación nacida en el 2020 en el seno de Geroa Bai y que aglutinaba las sensibilidades hasta entonces sin siglas del conjunto de independientes de la coalición. Y lo hacía, como admite en el programa Cara a Cara de Navarra Televisión, asumiendo el reto de reforzar el trabajo de su predecesora, la actual senadora autonómica por Navarra, Uxue Barkos.

No en vano, Azcona considera que el partido tiene grandes retos tras la salida de Uxue Barkos que, según opina, van a depender del trabajo de la formación para afrontarlos. "El carisma y liderazgo de Uxue Barkos ha sido innato y dio respuesta al anhelo de cambio político en Navarra. Ahora toca asentar eso y afrontar los retos de futuro", asegura.

Es ahí donde considera que el papel de Geroa Socialverdes va a ser clave para asentar el espacio político de Geroa Bai. "Nacimos en base a una reorganización interna de los independientes de la formación y con una ideología muy clara de algunos retos que ya están aquí".

Pablo Azcona en el plató del programa Cara a Cara de Navarra TelevisiónPablo Azcona en el plató del programa Cara a Cara de Navarra Televisión

Asegura que Geroa Bai ha sido pieza clave para el cambio en Navarra y "tenemos todo que decir en el futuro. Estar en el Gobierno tiene su desgaste pero Geroa Socialverdes viene a reforzar ese trabajo".

Así las cosas, admite que es pronto para decidir quién puede liderar una candidatura dentro de la coalición de cara a las próximas elecciones forales de 2027. Se limita a señalar que "primero trabajo de partido y reforzar las políticas socialverdes".

Recientemente, su compañera de filas en el Parlamento de Navarra, María Solana (PNV) era nombrada miembro del Consejo Administración de RTVE. Su salida de la política navarra así como las relaciones con el Partido Nacionalista Vasco, asegura, "están bien tasadas en la coalición. Compartimos proyecto y visión de lo que necesita Navarra. Hay una hoja de ruta clara dentro de Geroa Bai que se cumple a la perfección".

Pablo Azcona en el plató del programa Cara a Cara de Navarra TelevisiónPablo Azcona en el plató del programa Cara a Cara de Navarra Televisión

También habla de las relaciones con su socio en el Gobierno Foral, el PSN, "aunque bajo las diferencias". Dice que siempre han apostado por las políticas y espacios progresistas si bien puntualiza que "el PSN ha dado pasos importantes en políticas progresistas a pesar de que ha habido que esperar a que los lideren ellos. Tenemos desacuerdos tasados y otros que surgen en el día a día. Geroa Bai intenta avanzar en que Navarra sea el sujeto político que deseamos y que no dependa tanto de Madrid. Pedimos que nuestras decisiones no dependan de marcos fuera de la Comunidad Foral".

En torno a materia lingüística, por ejemplo, señala que "el PSN siempre vuelve a la dialéctica previa. Hemos conseguido acuerdos con ellos que eran impensables. Ningún derecho puede depender de una línea geográfica", en alusión a la zonificación.

Admite que no habla euskera aunque "está en ello. Mis hijos han podido estudiar en el modelo D cosa que en mi generación no se pudo porque estábamos divididos geográficamente. Queremos abordar un pacto político y social por el euskera. Mi acción política se ha dirigido siempre a que las posibilidades de quien quiera aprender euskera no se vean coartadas. Que quien quiera pueda elegir las mismas posibilidades educativas en cualquier zona de Navarra".

También opina sobre las relaciones con UPN. Azcona considera que la formación regionalista ha utilizado "exabruptos hacia Geroa Bai y se ha dirigido de manera violenta dialécticamente hablado hacia nuestra formación".

Asegura que "UPN tiene claro que la pieza que sobra en Navarra es Geroa Bai porque, desde que estas siglas están, ellos no gobiernan. Quieren volver a sus pactos de siempre ya que siempre hemos sido el denominador común de los pactos progresistas".

PRESUPUESTOS, FISCALIDAD Y EMPRESAS

"Sabemos leer el momento", dice Pablo Azcona, cuando se le pregunta por la etapa en que Geroa Bai tomó las riendas del Gobierno de Navarra en 2015. "Cuando llegamos al Gobierno, nos encontramos una situación casi de bancarrota. Había que revertir los recortes que se habían producido. Hicimos una reforma fiscal sabiendo que había que hacer un esfuerzo fiscal y pidiéndolo a las rentas medias y bajas. A partir de ahí y durante 10 años hemos conseguido que las arcas públicas estén saneadas. Además hemos sufrido inflación, fluctuaciones de energía y tipos de interés que afectan a esas rentas, por lo que ahora, la mirada fiscal tiene que atender eso. Estamos satisfechos con las medidas fiscales aprobadas para el año que viene y también con que la presidenta se haya comprometido a revisar fiscalmente las rentas medias y bajas".

Noticias como el concurso de acreedores en Sunsundegui, el cierre de BSH, el del grupo Antolóin o el traslado de la sede social de Berlys y Taberna a Madrid son preocupantes a ojos de Azcona, que destaca que "debe haber una mirada general. Estamos en un cambio de ciclo económico y de modelo y tenemos que aunar el crecimiento económico con las políticas sociales".

Defiende que Navarra es atractiva para las empresas frente a las críticas de la oposición. "Hay inversiones con la mirada puesta en el cambio de modelo industrial que vamos a tener que afrontar de una manera más sostenible".

En torno a la sanidad navarra, recuerda que "las listas de espera están mejorando tras salir de un punto de partida muy difícil. Ahora la tendencia marca que bajan cuando las medidas se ponen en marcha. Es obligatorio actuar en salud porque no hacer nada o no tomar medidas llevará a la ruptura del sistema en unos años".

Sobre el Monumento a los Caídos, "para nosotros es un edificio vergonzoso. El consenso de máximos sería tirarlo, pero hay que avanzar en mayorías", asegura. También opina sobre la iniciativa del Parlamento de Navarra de estudiar la prohibición de entrada a la Cámara Foral de las personas condenadas por el intento de acceder por la fuerza al edificio durante las protestas de los agricultores del pasado mes de marzo. "El Parlamento debe tomar medidas", opina.