Osasuna ya cuenta las horas para iniciar su 43ª andadura en Primera División de la mano de un Vicente Moreno que esta mañana no ha podido contar con José Arnaiz, jugador que no se ha ejercitado debido a molestias en el muslo derecho.

El Sadar ha acogido una sesión a puerta cerrada en la que la primera plantilla ha trabajado en base a ejercicios de activación, ruedas de pase y trabajo táctico. El míster valenciano ha dado los últimos detalles a sus futbolistas sin la mirada y oído del público, quien mañana sí podrá acceder a Tajonar.

La complejidad de ganar al Leganés, equipo recién ascendido, hace que el debut del sábado delante de su gente requiera de la mejor versión de un equipo falto de rodaje. Los empates ante el Huesca y Mirandés, y las derrotas ante el Athletic Club y Alavés, dejaron un mal sabor de boca, a pesar de tratarse de pruebas sin nada en juego.

Moreno saldrá con su mejor once para convertir las dudas de pretemporada en sensaciones positivas que den confianza al grupo. El estadio registrará una buena entrada con la idea de empujar a los suyos pase lo que pase.

Bryan Zaragoza acaparará todas las miradas. El extremo, en calidad de cedido por el Bayern para el próximo curso, tiene el reto de recuperar los minutos y juego que le llevaron a ser la gran sensación del Granada durante la primera mitad del pasado campeonato, ganándose el pase al gigante alemán en el mercado invernal.

Mañana, los rojillos cerrarán su preparación del partido del sábado con una sesión que se desarrollará a puerta abierta en Tajonar a partir de las 9:30 horas. A las 12:30 horas, Vicente Moreno atenderá a los medios de comunicación en la sala de prensa de las instalaciones rojillas.