Helvetia Anaitasuna mide ante el Bathco Torrelavega (20:00 horas, LaLiga+) su estado de forma tras caer la semana pasada en casa frente al Barcelona con un mal inicio de segunda mitad que empañó el buen comienzo ante los blaugranas.
Los navarros pasaron el sábado por el 'dentista' para dejar atrás una de las citas más perezosas del año. Los de Quique Domínguez salieron sin tapujos para plantar cara en 15 minutos que gustaron a la grada. Al descanso se llegó con una desventaja de 7 tantos, aviso de lo que estaba por llegar.
Un parcial de 2-14 favorable a los visitantes dinamitó cualquier atisbo de remontada, dejando tocados a unos locales que, con el paso de los minutos, se fueron soltando hasta acercarse a una versión acorde a la realidad. Mañana, vuelven a su Liga.
"Hay que estar preparados para pasar momentos menos buenos, como puede ser el nuestro ahora por calendario o por las muchas cosas que nos están pasando, pero que hay que estar listos y saber competir en circunstancias no tan buenas", anotó Domínguez en rueda de prensa sobre la fase que atraviesan.
Torrelavega será un buen test para ver cómo responde el equipo después del 24-40 ante los culés. Con varios lesionado de peso, Domínguez deberá organizarse para demostrar la capacidad de una plantilla comprometida con todo lo que propone su entrenador.
"Vienen de hacer una gran eliminatoria de Copa del Rey y de pasar a la final a 8 en una pista contra Nava. Estarán con ese refuerzo moral y anímico de ese gran resultado", dijo Domínguez sobre el estado en el que llega su rival.
La dinámica lejos de Pamplona es mala. Cinco derrotas y un empate en las seis últimas salidas han estancado a un grupo de jugadores que no han podido ganar dos partidos seguidos a domicilio.
La undécima posición con 22 puntos permite a Anaitasuna mirar con tranquilidad a la zona de descenso. Torrelavega es octavo (23), por lo que el choque de mañana adquiere cierta relevancia dentro de un campeonato igualado. Restan seis jornadas y Anaitasuna quiere posicionarse lo más arriba posible.