Hace tres años y medio, el Parma pagó 13 millones de euros por el traspaso desde el Steaua de Bucarest del internacional rumano Dennis Man, capital en el ascenso del conjunto italiano este curso a la Serie A y figura en el reencuentro 24 años después de su país con la victoria en una Eurocopa en el grupo E, en la que emuló a Gheorghe Hagi. 

Desde el 19 de junio de 1994, en el Mundial de Estados Unidos contra Colombia, con un triunfo por 1-3 donde la leyenda del fútbol rumano repartió dos asistencias en un solo encuentro, nadie había vuelto a hacerlo en ninguno de los siguientes 21 duelos de la selección entre la Copa del Mundo y la Eurocopa hasta el pasado lunes, cuando Man rememoró tal aportación.

Dio los pases en el primer tanto, cuando recogió un despeje defectuoso de Andriy Lunin y se la entregó a Nicolae Stanciu para un fenomenal derechazo, y en el tercero, cuando sirvió a Dragus para el remate dentro del área. También promovió el contragolpe que originó la segunda diana, anotada por Razvan Mari con un tiro lejano que no atrapó el portero rival.

Era su vigésimoquinto encuentro como internacional, desde su debut el 27 de marzo de 2018, con siete goles y tres asistencias, pero el primero en una gran competición para el extremo derecho, de 25 años, autor de 11 tantos y seis asistencias para devolver al Parma a la Serie A durante la actual temporada.

Rumanía, vencedor por 0-3, solo había ganado uno de sus 16 choques anteriores en la fase final de la Eurocopa: el 20 de junio del año 2000 por 2-3 ante Inglaterra. 

Su crecimiento en los tres últimos años en el 'Calcio' es evidente. Y en este torneo continental se ha encargado de demostrarlo con creces ante los ojos de miles de personas. Con su actuación en el primer partido de su selección en el campeonato continental, Man se ha erigido como uno de los héroes de su país. Ahora aspira a seguir ampliando la leyenda, tratando de llevar a Rumanía a cotas más altas.