Osasuna encajó un duro correctivo ante el Granada CF. Los de Pamplona ofrecieron una imagen apática, sin competitividad y por ello en la primera mitad apenas crearon peligro. Para colmo, el cuadro local anotó el 1-0 en su primera llegada a portería, que fue a los 29 minutos de partido, cuando Pellistri sorprendió por el perfil diestro y de fuerte remate dentro del área envió el balón al fondo de la red. Antes del gol no había ocurrido nada en una aburrida primera mitad.
Solo tras encajar el gol mejoró Osasuna y lo hizo por medio de Raúl García en el minuto 35. El delantero osasunista recibió un pase de Rubén Peña y lo remató de cabeza, aunque pegó en la madera. Ese balón repelido por el palo tampoco lo pudo aprovechar en segunda instancia. De ahí al descanso el Granada aguantaría las tímidas llegadas navarras.
Ya en la segunda parte se volvió a repetir el guion. Fría salida de los pamploneses y el Granada marcó en su primera ocasión de peligro. Uzuni protagonizó el 2-0 en el minuto 48 después de ganar un balón a la espalda de la defensa. De nuevo, tras encajar Osasuna llegaría la reacción, pero otra vez la falta de acierto en las botas de Raúl García iba a penalizar al equipo. Un golpeo cruzado del delantero andaluz lo despejó a córner el portero.
El partido era un quiero y no puedo, con un equipo visitante lento en la circulación de balón y que apenas inquietaba, hasta que en otra acción a la espalda de la defensa, en este caso Lucas Boyé, lograba el tercero. Aunque en un primer momento la zaga rojilla consiguió repeler el primer intento, en el rechazo sí marcó el delantero local. Otra muestra más de la falta de intensidad que se veía en el verde del estadio Los Cármenes. Tampoco los cambios habían logrado reactivar al equipo, que da la sensación de necesitar el final de temporada. Tercera derrota consecutiva para los de Arrasate.