Navarra ha cerrado 2023 con un crecimiento medio anual del PIB de 1,9%, dos décimas por encima de las previsiones recogidas en el cuadro macroeconómico de octubre y cinco décimas más de lo estimado hace un año. En valores interanuales, la economía navarra ha experimentado un descenso en tasa interanual, pasando del 1,7% del tercer trimestre al 1,4% mostrado en este cuarto trimestre.
Estas cifras han sido presentadas en rueda de prensa por el consejero de Economía y Hacienda del Gobierno foral, José Luis Arasti, quien ha destacado que van en línea con la tendencia nacional y están motivadas por "la debilidad de la demanda en la Europa y la incertidumbre de los mercados, que ha impactado directamente en el sector industrial, dos elementos muy importantes en la estructura productiva navarra que han ralentizado la actividad regional".
En cuanto a los indicadores económicos que determinan esta situación, el consejero ha puesto de manifiesto que el consumo interno es el principal factor del crecimiento del PIB de la Comunidad foral, acompañado de la creación de empleo y las subidas salariales, dos elementos que también apuntalan la actividad económica navarra.
La economía navarra creció en 2023 un 1,9% - Foto: ARCHIVO E.PAsimismo, el crecimiento de la inversión favorece esta situación puesto que la demanda interna "mantiene una tendencia positiva". Sin embargo, ha comentado, los mercados internacionales, especialmente los de la eurozona, siguen debilitados, un factor que no contribuye al aumento de las exportaciones ni al desarrollo de la actividad industrial en Navarra.
El consejero también ha puesto en valor los datos "positivos" que arroja el mercado laboral, con una ocupación en progresión ascendente, una afiliación a la Seguridad Social en niveles máximos y una tasa de desempleo del 9,3%, ocho décimas menos que hace un año. Además, ha dicho, la evolución de los precios también se ha ido conteniendo a lo largo del año, y el año finaliza con una tasa de inflación del 2,9%, una cifra muy inferior a la de enero de 2023.
COYUNTURA INTERNACIONAL Y PREVISIONES DE FUTURO
El año 2024 aparece como un año "incierto" en materia de previsiones económicas. El escenario internacional revela un mercado que seguirá caracterizado por una elevada inflación y unos tipos de interés en niveles máximos desde 2014, ha indicado el consejero.
"La debilitada demanda externa y las tensiones geopolíticas del contexto internacional también contribuirán a una moderación del crecimiento económico, que probablemente permanecerá por debajo del experimentado en 2023", ha dicho.
Las previsiones para la economía navarra durante este 2024, ha expuesto el consejero, coinciden en una moderación en el crecimiento del PIB. Entidades como BBVA, Caixabank Research, Ceprede, AIReF o Laboral Kutxa lo sitúan en torno a un 1,5% de promedio, cuatro décimas menos que el avance previsto para 2023. "Estas previsiones están en línea con la desaceleración que se prevé para la economía mundial y española, y están alineadas con el cuadro macroeconómico del Gobierno de Navarra", ha dicho Arasti. Dichas previsiones se sitúan en el 1,3%.
Finalmente, y a tenor de los buenos datos de los últimos meses, el consejero ha expresado su confianza en "la fortaleza de la economía navarra y en la creación de empleo".