Alrededor de 200 personas han participado este sábado en una manifestación en Pamplona, convocada por AHT Gelditu, en la que se ha reclamado la paralización del proyecto de Tren de Alta Velocidad (TAV) y dedicar su inversión a gasto social, en especial los cuidados.
La movilización ha partido pasadas las 12.20 horas desde la Avenida Carlos III, junto al Palacio de Navarra. Ha estado precedida por la figura de un elefante blanco seguida de una pancarta con el lema 'Cuidado con el TAV. Con el TAV no hay cuidados'. También se han visto carteles con mensajes que pedían destinar el dinero de esta infraestructura a sanidad pública o residencias. Asimismo, se ha portado una pancarta en la que se comparaba la inversión correspondiente a un kilómetro de TAV con el número de trabajadores de residencias o ayuda a domicilio.
En declaraciones previas a los medios de comunicación, representantes de AHT Gelditu han afirmado que "el TAV es el elefante blanco más grande de Euskal Herria" y es "la infraestructura más destructora, más despilfarradora y más inútil".
Además, han advertido de que "tiene severas consecuencias en diferentes dimensiones y se enfrenta contra los pilares de la vida así como a los cuidados" ya que "vemos que se apropia y engulle presupuestos públicos importantes para poder cubrir los cuidados de una manera colectiva y digna". En este sentido, han apuntado que "recientemente se han adjudicado más de 400 millones de euros al TAV en Navarra con los fondos Next Generation".
Por otro lado, han remarcado que "el cuidado de la tierra es imprescindible para el cuidado de todas las personas y los seres y vemos que el TAV produce un gran impacto y destrucción en el entorno". Además, "promueve un modelo de sociedad que no da prioridad a los cuidados".
Por todo ello, desde AHT Gelditu han exigido "la paralización de todas las obras del TAV, tanto del corredor navarro como de la Y vasca" y han llamado "a la clase trabajadora de Euskal Herria a organizarnos contra el capitalismo y a luchar a favor de la tierra y de otro modelo de sociedad".
En un comunicado, el colectivo afirma que el TAV "devora los recursos necesarios y destruye las condiciones para el bienestar de todos los seres vivos", "absorbe los presupuestos que deberían destinarse al cuidado y al bienestar social" y "profundiza en la mercantilización, privatización, industrialización y deterioro de la naturaleza y de los patrimonios públicos y comunitarios".