El Congreso de los Diputados ha dado por aprobada la ley de antecedentes penales que permitirá la salida anticipada de algunos etarras de prisión y no la volverá a votar como pidió este lunes el Senado, que consideraba que el rechazo por mayoría absoluta de la Cámara Alta al texto equivalía a un veto.
La Mesa del Congreso ha tomado esta decisión con el voto en contra del PP y tras escuchar a los servicios jurídicos de la Cámara, según han informado fuentes parlamentarias, que han añadido que la norma sería enviada al Boletín Oficial del Estado (BOE) para su publicación.
El presidente del Senado, Pedro Rollán, anunció este lunes tras la votación en contra del pleno a la citada ley que entendía ese rechazo por mayoría absoluta como un veto y por ello se devolvía al Congreso, decisión avalada por un informe de los letrados de la cámara alta.
En una decisión más rápida de lo que se esperaba, la Mesa del Congreso ha resuelto que le corresponde respetar los procedimientos reglados y entiende como validada la Ley Orgánica 7/2014 sobre intercambio de información de antecedentes penales y consideración de resoluciones judiciales penales en la Unión Europea, que será enviada al Gobierno y al BOE para su publicación.
El vicepresidente primero del Congreso y diputado del PSOE, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, ha acusado al Partido Popular de emplear una "triquiñuela" en el Senado por la que Mesa del Congreso no puede pasar.
En declaraciones a los medios, ha rechazado que este lunes la citada ley fuera vetada porque en el caso de que fuese un veto se necesita un requisito como es interponerlo en el plazo de diez días, cosa que no se hizo.
"Ellos lo llaman veto, pero no es ningún veto. Como decimos, barco no es animal de compañía", ha añadido De Celis.
Preguntado por si cree que el presidente del Senado, Pedro Rollán, ha incumplido deliberadamente la ley -como han asegurado fuentes parlamentarias-, ha dicho que eso lo tendrán que estudiar los servicios jurídicos del grupo parlamentario socialista en el Senado o del Congreso.
En todo caso, ha considerado que la actuación de Rollán ha sido "muy desacertada" porque "se saca de la manga -ha dicho- algo que es impropio, que es que la mayoría absoluta puede contra todo" y está "por encima de la ley".
Ha reprochado además al presidente del Senado que diera por aprobado el veto después de que se produjera la votación, por lo que los senadores no sabían que se estaba debatiendo un veto.
En democracia, ha subrayado De Celis, es muy importante el procedimiento y en el artículo 107 del Senado establece claramente cuál es el procedimiento a seguir para que salga adelante un veto.
Tras la respuesta al Senado, Vox estudia, por su parte, recurrir en amparo al Constitucional, según han señalado fuentes de la formación de Santiago Abascal, mientras que su portavoz parlamentaria, Pepa Millán, ha acusado la Mesa del Congreso de hacer "trampas" y de "manosear el reglamento". Vox ha presentado además un escrito dirigido a la Mesa exigiendo una nueva votación de la ley.
Para algunos socios de la izquierda, como Compromís, el PP está naciendo el ridículo y no puede ser "más miserable" con esta estrategia del veto, ha señalado Águeda Micó, al afirmar que ETA acabó hace mucho tiempo y lo que quiere ahora la gente son políticas de cohesión y convivencia. Además, ha defendido que el Partido Popular "era muy consciente de lo que estaba votando", algo en lo que ha incidido también De Celis.
El portavoz de Podemos en el Congreso, Javier Sánchez Serna, ha considerado por su parte que lo que ha hecho la Mesa es "no caer en la trampa que el PP intentó en el Senado" y seguir, en su lugar, el "procedimiento normal de trasposición de una directiva europea".