Las víctimas de ETA aseguran estar presas de un sentimiento de «indefensión absoluta», tras conocerse el pasado lunes la aprobación de una ley que permitirá a más de 40 presos rebajar sus condenas. Una devastación que les llevó ayer a apelar al Gobierno para que retire la norma y «no les vuelva a fallar», pero también a cargar con rabia contra lo que denuncian como un «manoseo» político de la imagen de sus muertos, con Miguel Tellado en la diana de sus dardos.
La presidenta del Colectivo de Víctimas del Terrorismo (Covite), Consuelo Ordóñez, estalló contra el portavoz del PP en el Congreso por usar fotografías de víctimas de ETA que formaron parte del PSOE para arremeter contra el Gobierno de Pedro Sánchez.
«Esta imagen será de las más repugnantes que me ha tocado ver en mi vida. Resume a la perfección lo que significan nuestros seres queridos para vosotros», expresó con enfado la hermana del político popular Gregorio Ordóñez, asesinado por la banda terrorista en 1995, en un mensaje en X.
Dicho esto, Ordóñez reclamó a los de Alberto Núñez Feijóo que quitaran «sus sucias manos de encima de mis seres queridos», y añadió: «No podéis dar más asco».
El tuit comparte el vídeo en el que Tellado muestra el cartel, y se ve cómo el portavoz del PP hostiga al ministro de Transformación Digital con las fotos, mientras su compañera de bancada, Macarena Montesinos, se ríe.
Pero Ordóñez no es la única en mostrar públicamente su enfado. María Jáuregui, hija del que fuera gobernador civil de Gipuzkoa asesinado por ETA, Juan María Jáuregui, y Josu Elespe, hijo de Froilán Elespe, primer teniente de alcalde socialista del Ayuntamiento de Lasarte-Oria, víctima también de la banda terrorista, denunciaron igualmente el gesto de Tellado.
Jáuregui se dirigió al portavoz popular para instarle a ver si es capaz de mirarla a los ojos y decirle que no volverá a usar la imagen de su padre «como arma arrojadiza». «A ver si de una vez por todas respetas su memoria», le reclamó en redes sociales. También por este cauce, Elespe afirmó que «menos mal» que lo que diga Tellado se la «repanpinfla en grado extremo». «Si no, ver cómo sujeta carroñeramente una foto con la imagen de mi padre, me revolvería las tripas hasta el vómito», zanjó.
A cambio de votos
En paralelo, la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) envió una carta al presidente del Gobierno en la que, en nombre de sus 4.800 asociados, expresa su devastación ante la reforma legal y le ruega que «no cambie por unos votos manchados de sangre a las víctimas del terrorismo». La misiva explica, además, que la centralita de la asociación está colapsada de decenas de llamadas de víctimas y familiares que expresan que «están volviendo a matar» a sus familiares.
Remitido y firmado por la presidenta de la AVT, Maite Araluce, el texto también informa a Sánchez de que muchos ciudadanos también les llaman porque no entienden «cómo el final del terrorismo de ETA lo están escribiendo los verdugos. Cómo matar va a salir prácticamente gratis en este país».
Con todo, antes de finalizar la carta, la presidenta de la AVT insta al jefe del Ejecutivo a dar marcha atrás: «Ahora mismo tiene usted en su mano no volver a fallarnos una vez más. No cambie por unos votos manchados de sangre a las víctimas del terrorismo. Aunque sea solo esta vez, escúchenos», le reclamó.