La presidenta de Unión del Pueblo Navarro (UPN) desde abril, Cristina Ibarrola cree que su partido es "más necesario que nunca" en defensa de la foralidad navarra: "María Chivite (la presidenta del Gobierno autonómico) siempre que tiene que elegir entre Navarra y Pedro Sánchez, elige a Pedro Sánchez", afirma en una entrevista con EFE.
En las tres últimas legislaturas UPN no ha conseguido gobernar Navarra a pesar de ser el partido más votado. En el caso del Ayuntamiento de Pamplona, Ibarrola accedió a la alcaldía tras las últimas elecciones locales gracias al voto en blanco del PSN. Seis meses después los socialistas apoyaron una moción de censura que la desalojó del cargo y dio la vara de mando a EH-Bildu.
A su juicio, el PSN "pasó una línea roja difícilmente imaginable" al "regalar" una institución a EH Bildu.
"El PSN pasó una línea roja difícilmente imaginable" - Foto: Ballesteros"Estamos siempre dispuestos a acordar, a escuchar, a hablar de cómo resolver los problemas de Navarra y de los navarros con el Partido Socialista o con cualquier otro partido que coincida con nosotros en la forma de arreglarlos. Pero las relaciones personales, quedaron muy dañadas", afirma.
"Navarra se gobierna desde Pamplona"
Ibarrola carga contra Chivite, convencida de que "no está defendiendo de forma adecuada las competencias de Navarra", y busca también marcar perfil propio ante el PP, partido con el que tienen, admite, "muchas coincidencias en muchos temas".
"Pero UPN es el partido foralista por convicción, por sentimiento, por historia. UPN es el partido que defiende el régimen foral de Navarra; lo llevamos en el ADN; nadie nos puede dar ninguna lección en esto, ni el Partido Socialista, ni el Partido Popular ni ningún otro partido, porque nosotros nacimos para eso y somos más necesarios que nunca para eso", recalca.
En 2023 UPN y PP se presentaron por separado por primera vez en unas generales desde 1979 y el resultado no fue bueno. Ibarrola no aclara qué pasará en los próximos comicios, pero hoy cree que UPN tiene que tener "voz propia" en el Congreso y en el Senado.
"Lo que yo tengo muy claro es que Navarra se gobierna desde Pamplona. No se gobierna desde Madrid ni desde Bilbao; desde lo que marcan partidos nacionales en Madrid, ni desde lo que marcan partidos independentistas vascos desde Bilbao", subraya en referencia a los acuerdos de los socialistas con PNV y Bildu.
Como ejemplos de esa voz propia respecto a los populares recuerda que el diputado de UPN votó a favor del proyecto de ley socialista contra el proxenetismo -que el PP rechazó y acabó fracasando por falta de apoyos- o del traspaso de las transferencias de tráfico a Navarra.
"Votamos lo que responsablemente defendemos, con coherencia", afirma; "Pero no nos vendemos a nada", apostilla antes de lamentar que la política se esté convirtiendo en un "puro mercadeo".
Un Convenio Económico "solidario"
En ese panorama enmarca la moción de censura que la apeó de la alcaldía de Pamplona, pero también el acuerdo de los socialistas con ERC para dotar a Cataluña de una 'financiación singular".
Su partido, afirma, no está cerrado a hablar de modelos de financiación, pero siempre "desde el rigor y la seriedad". Y pide quitar el foco del régimen foral de Navarra y de su Convenio Económico que, destaca, "no es ningún privilegio y es solidario con España".
UPN quiere que Navarra "siga siendo una comunidad autónoma diferenciada, pero dentro de España", añade Ibarrola, que apuesta por más autogobierno, pero critica que en estos momentos partidos como el PNV y Bildu estén negociando competencias para Navarra en nombre de la comunidad foral.
Según apunta, no le incomoda haber coincidido con esos partidos al apoyar el traspaso de las competencias de tráfico a Navarra: "Ellos votarán lo que consideren, nosotros votamos lo que responsablemente defendemos y creemos y lo que hemos defendido toda la vida".
"Nosotros queremos la competencia de tráfico, queremos que la lidere la Policía Foral de Navarra, pero queremos que la Guardia Civil de Navarra siga ejerciendo junto a policía Foral la gestión de la prestación, que es en lo que no coinciden EH Bildu ni PSN", afirma.
Promesas incumplidas con Navarra
Ibarrola recrimina "muchas promesas incumplidas" a Chivite, al frente del Gobierno foral desde 2019 gracias a la abstención de EH Bildu.
A su juicio, "Navarra no ha tenido lo que merece en mucho tiempo" y pone como ejemplo las infraestructuras: "Hemos contribuido a todo el tren de alta velocidad del 80 % de los españoles y Navarra sigue aislado sin tren de alta velocidad, con gobiernos socialistas y con gobiernos del PP. Somos la única capital de España que no estamos conectados con Madrid por autovía".
El ministro de Transporte, Óscar Puente, indicó la semana pasada en el Congreso que su objetivo es que el AVE llegue a Pamplona antes de 2030, pero Ibarrola recuerda que Chivite prometió que la alta velocidad llegaría a Navarra antes del fin de la legislatura, es decir, 2027.
"Lo que queremos es que tengamos ya plazos, cronograma y con compromisos presupuestarios para que Navarra no siga aislada", destaca.
El "juego de tronos" de Sánchez
A pesar de la actual inestabilidad parlamentaria, Ibarrola no ve cerca el final de la legislatura y carga con dureza contra Pedro Sánchez, a quien ve como una "máquina de mentir".
A su juicio, nadie convoca elecciones si sabe que va a perderlas -"y el riesgo de Pedro Sánchez ahora sería importante"- y hoy en día tampoco es probable una moción de censura.
Mientras la nueva dirección de UPN diseña las prioridades de su agenda política, Ibarrola tiene el reto de consolidar su imagen como presidenta del partido sin escaño en el Parlamento foral, donde el anterior presidente, Javier Esparza, ejerce de portavoz del grupo.
"No me parece para nada incompatible liderar el partido y no estar en el grupo parlamentario", apunta sin despejar dudas sobre su futuro: "Yo ya dije que quiero volver a intentar ser alcaldesa de Pamplona, pero no sé lo que va a pasar".