El alcalde de Pamplona, Joseba Asiron, ha apostado por "retomar" el trabajo iniciado en la legislatura 2015-2019 respecto al Monumento a los Caídos. "Tenemos siete magníficos anteproyectos y lo que creemos que hay que hacer es retomar aquella selección, identificar de esos siete los que mayor consenso generen, y someterlo a la votación, a la opinión de la ciudadanía", ha indicado.
En respuesta a los medios de comunicación durante una rueda de prensa, el alcalde ha relatado que el "guion iniciado" en la legislatura 2015-2019 "consistió, en primer lugar, en la exhumación de los generales franquistas que allí estaban enterrados, y en el renombramiento, por así decirlo, de la plaza como Plaza de la libertad". "En aquel momento también se hizo un concurso internacional de ideas que tuvo un éxito enorme, donde vinieron representantes de varios países a darnos su opinión sobre una visión nueva sobre los caídos", ha añadido.
Según ha indicado, "los expertos internacionales señalaron e identificaron siete anteproyectos que recogen soluciones para la zona de la Plaza de la Libertad y el Monumento a los Caídos que oscilan, por así decir, en un abanico de posibilidades desde la resignificación del edificio hasta su eliminación física". Sin embargo, "hubo un cambio de gobierno, volvió UPN a la Alcaldía de Pamplona y quedó cortado aquel proceso".
Ha considerado Asiron que "el mejor proyecto será el que concite mayor consenso, siempre que se tengan en cuenta" dos parámetros: el parámetro de la memoria histórica -pues "es un lugar que todavía, a día de hoy, genera desasosiego en gran parte de la población, por no decir en el 100% de la población"-, pero también el punto de vista urbanístico, porque la Plaza de la Libertad y el Monumento de los Caídos "es una rótula que comunica el Segundo ensanche de Pamplona con los nuevos desarrollos de Lezkairu", por lo que "hay que darle esa doble solución".
En este sentido, ha considerado que "hay que darle continuidad al trabajo iniciado en 2015-2019, que fue muy interesante y recoge todas las sensibilidades posibles". "Yo tranquilizaría muchísimo a las asociaciones memorialistas y al resto de la sociedad. Este Ayuntamiento, esta alcaldía, fue la primera que intervino en esa zona, hasta que llegó esta alcaldía no se había intervenido significativamente en la zona y, consecuentemente, seremos también nosotras y nosotros quienes demos continuidad con el mismo ímpetu y con el mismo convencimiento", ha apuntado, tras insistir en que este tema "no tiene por qué generar ninguna incertidumbre".
Preguntado por su opinión personal al respecto, Asiron ha incidido en que "el mejor proyecto será el que diga la ciudadanía". "Manifestar mi criterio, mi opinión propia, que por supuesto que la tengo, no sé si aporta mucho. Individualmente la puedo dar y la doy muchas veces, como alcalde creo que tengo que mantener cierta imparcialidad", ha subrayado.
En esta línea, ha remarcado que "cada uno seguramente tenemos nuestra propia opinión", pero "más allá de intentar fríamente imponer cada uno su criterio, lo que hay que hacer es hablar, dialogar, y de la manera lo más participada y más democrática posible, intentar que salga adelante el proyecto que mayor apoyo y mayor consenso genere en la ciudadanía, sea el derribo, sea la resignificación".