Hasta cinco internacionales españoles que disputan la Eurocopa 2024 -Fabián Ruiz, Mikel Merino, Dani Olmo, Mikel Oyarzabal y Unai Simón- saben lo que es vencer a Alemania en una final, la del campeonato continental sub'21 en 2019. Pero también Merino y Oyarzabal, junto a Rodri, sintieron la derrota dos años antes en el partido por el título en el Europeo de esa categoría.

En el presente, el respeto marca la cita de cuartos en Stuttgart con España lista para encarar el reto de vencer al anfitrión en el torneo, algo que nunca ha logrado.

«Ellos juegan en casa, pero nosotros tenemos muchas armas. Estoy convencido de que no están contentos de que les toquemos», aseguró Rodri Hernández, cuyo rol en la selección ha cambiado desde aquel mal recuerdo en 2017. Por aquel entonces, no tuvo minutos en la final. Ahora es clave en la absoluta.

En la mejor de las memorias de esa generación que ha dado el salto a la élite está el triunfo en el estadio Friuli de Udine el último día de junio de 2019, con Luis de la Fuente al mando. Unai Simón perdió en aquella competición la titularidad de una portería que parecía garantizada, para que Antonio Sivera jugará gran parte del torneo continental.

Fabián Ruiz acabó siendo elegido mejor jugador del campeonato, dirigiendo el juego como en el presente, en su momento más dulce en la Roja con dos goles y una asistencia en un certamen inconmensurable. También fueron titulares Olmo y Oyarzabal. Mikel Merino entró en la recta final para sostener el triunfo. Porque España lo sintió hecho con los goles del 'MVP' y del actual '10' de la selección, pero Amiri animó el final con un tanto en el 88.

Era la quinta conquista del título. El germen de lo que estaba por llegar con el técnico riojano al mando del combinado nacional en la conquista de la Liga de Naciones primero y ahora en una Eurocopa que ha vuelto a enganchar al aficionado, con un estilo de juego atractivo. Un pleno de triunfos con un fútbol repleto de personalidad.

El contraste con el exhibido por las grandes favoritas, con Alemania solamente acercándose en un inicio arrollador que decayó con el paso de la competición, ha cambiado la forma en la que se mira a España pero no la forma en la que la selección mira al resto de rivales.

«No veo a ningún equipo superior a nosotros», comentó Lamine Yamal con el mismo descaro ante el micrófono que en los terrenos de juego. «Tenemos posibilidades de ganar a todos. Son los cuartos de final ante Alemania pero saldremos igual que ante cualquier otra selección. Iremos con muchas ganas para pasar a semifinales», señaló.

En el desborde del azulgrana y de Nico Williams se basan muchas de las opciones de éxito de la Roja, la que más regates realiza de todas las escuadras y desborde tiene en las bandas.

El anfitrión y el reto de ganarle por primera vez esperan a España, pero para este grupo de futbolistas no existe el pasado. ¿Quién dijo miedo?